En medio de una oscuridad total comenzó una de los tantos desencuentros del viaje ya que siempre un grupo iba un poco más rápido. En este caso (Leo, el Mapache y yo) luego de un buen trecho paramos a esperar a la muchachada que venía atrás.
En este lugar nos agarro la noche a Leo, al Mapache y a mí.
Mientras aguardábamos se nos vinos la noche pero esta apareció en forma casi instantánea como si alguien hubiera apagado la luz del cuarto. Creo que esperamos a la chicas como mas de una hora, para esa momento del día estábamos extremadamente cansados, sinceramente teníamos una desidia u apatía, fruto del agotamiento que no queríamos volver para atrás por ese camino tan difícil y encima en medio de la oscuridad. Muy mal en nosotros.
Con la noche comenzó el concierto nocturno de cantos de pájaros, aullidos monos y quien sabe que otros bichos. Amen que en los costados de la ruta y entre la vegetación comenzábamos a percibir el intenso ruido de la fauna moviéndose entre los pastizales. Jaja Desde luego alguno tiro comentarios de asesinos seriales u animales devora hombres de las selvas bolivianas. Jaja Por lo menos yo que soy medio cagon, tenía mi navaja a mano. Jaja Así que mientras estábamos en ese limbo de terror, desinterés y cansancio. Vimos la primera luz a lo lejos…
Era Fede (CG 150), Nicoleta(YBR 125) y Marian(XT 225) según comentarios de ellos el Falcon había tenido otra caída seria y mientras solucionaban este inconveniente (creo que Luquita se había lesionado levemente) se percataron que Stefy no estaba con ellos (generalmente el mapache se movía con Lucas y Vic) Sabían que Leo y yo estábamos adelante. Pero como nadie se había percatado que el Mapache los había pasado. Vic/Lucas mandaron las motos más lentas para adelante mientras ellos desandaban el camino en busca del rebelde mapache. jajá
Cuando Fede, Nico y Marian llegaron a nuestra posición se sorprendieron de ver a la bestia peluda de Stefy con nosotros. Ahí comenzó un dilema que carajo hacíamos si los otros dos estaban volviendo para atrás. Fue en ese momento que decidimos que Fede, Nico, Marian y el mapache siguieran a San Borja que estaba como a 80 km. Leo y yo, con los Tornados, volveríamos a buscar a Vic y Luqui. Pero antes de salir le recalque a Stefy que se quedara a las ordenes de los chicos y no se separada de ellos porque todavía no sabíamos si había pasado algo con Vic/Lucas y aparte es mejor que el grupo condujera unido. Pobre iluso…
Así que nos fuimos con Leo a buscar a los chicos. Nos cruzamos con tres camiones que medio no quisieron parar, imagínate la escena dos motos con las luces encendidas y con tipos parados en medio de un camino de barro en medio de la selva, toda la desconfianza. Jaja Los dos primeros no habían visto las motos (ahí nos desesperamos porque pensábamos que podía haber pasado algo) pero el tercero nos dijo que si había visto dos motos pero no que venían hacia nuestra posición sino que iban en sentido contrario. Después de este informe hicimos como 15 km mas y no podíamos encontrarlos. Sabiendo que al menos estaban bien y tenían una carpa (nosotros no la teníaamos) es que decidimos retornar con el resto del grupo. Hicimos dos km mas y por cosas de la telepatía o que se yo jaja. Decidí parar mi moto y ver si veía a los chicos. Leo para ese momento se me fue lejos y me quede solo. No pasaron dos minutos que vi las luces de los chicos. A los minutos volvió Leo y los cuatros nos fuimos a los palos por el otro grupo. Al tener todos motos doble propósitos los alcanzamos unos 40 km antes de San Borja. Cuarenta kilómetros que no se terminaban más. Jaja
Cuando nos reunimos con el primer grupo, el rebelde de Stefy los había abandonado. Se había caído un par de veces y los chicos hasta le habían levantado la moto. Pero inmediatamente los dejo y comenzó al darle máxima velocidad a su motito y los dejo.
Finalmente llegamos a San Borja, en donde nos aguardaba Stefy. Cruzamos el puente de acceso a la ciudad, sorteamos un reten del Ejército Boliviano y fuimos derecho a un borracherio construido de telas y chapas a hidratarnos, literalmente estábamos muertos de sed y ahí se apaciguo la tensión y bajamos los niveles de adrenalina.
Esta es la única foto que sacamos en este tramo en nocturno, demasiado quilombo teníamos para andar boludiando con las cámaras. Jaja
Pero mientras estábamos en el bar y un poco más relajados. Le dimos una buena cagada a pedos a Stefy por dejar a los chicos. Estuvimos muy duros con nuestro querido mapache. Jaja
Mientras el resto seguía boludiando y ya tomándose cervezas. jaja Junto con Nico nos fuimos a buscar alojamiento. Encontramos un hotel que había buscado por Internet. Así que guiamos a los chicos al hotelucho, desempacamos, así sin bañarnos, nos fuimos a comer pollo, papa fritas y arroz. La tradicional comida boliviana del camino. Todos ya se habían olvidado del colera y otras enfermedades de las comidas. Los tipos literalmente de a poco se estaban embruteciendo. jaja
En esta vemos al joven y rebelde Stefy jaja depresivo y callado luego de la cagada a pedo que le pegamos entre todos. Que se le va hacer negro hoy te toco a vos. jaja
Los chicos no se habían dormido que las pulgas ya nos estaban atacando, por lejos el peor lugar en el que dormí en mi vida, eso que apolille en lugares fuleros.
Bueno así termino uno de los días más duros que tuve en mi vida de motociclista y creo que para mis compañeros fue igual. Fue durísimo…
Continuará...
Saludos amigos