calquin24 Dom Ene 05, 2014 8:42 pm
Pero como llegamos a pleno mediodía, era la hora de la comida. Todo un tema este punto en Bolivia, ya que el país tiene fama de que si vos comes algún alimento en los barcitos al costado de la ruta podes sufrir algún tipo de enfermedad. Esto es cierto y a algunos viajeros les sucedió pero por lo menos en mi caso particular y el de Leo era la cuarta vez que estábamos en Bolivia y nunca habíamos sufrido ningún percance con la parte culinaria. Eso que habíamos comido en cada lugares más raros y no del todo higiénicos. jajá Pero como en este viaje no llevábamos elementos para cocinarnos, a excepción de Nico que luego nos salvo con este punto, si o si deberíamos comer en algún lado. Así que en la parada casi todos nos fuimos a un almacén para disfrutar de unas ricas galletitas saladas, desde luego bien cerraditas y con sus correspondientes rótulos de alimentos seguros. Jaja
En la puerta del almacén en busca de alguna galletita Criollita. jaja.
Pero Leo me dice:
- Fíjate que hay un bar ahí enfrente que pinta muy lindo.
Así que entre comer esas galletitas de mierda y con mi voracidad de gordito. Jaja No lo dude un segundo y encaramos nuestras naves para ese lugar. Después se arrimaron el resto de los muchachos y entre todo nos dimos una regia panzada. JAJA
A partir de ahí medio que la mayoría le perdieron el miedo a comer en los barcitos de los pueblos. Aunque algunos “delicaditos” jaja nunca se pudieron acostumbrar del todo. Bueno acá aprendimos la lección de la comida. Durante la noche del día previo aprendimos el tema de los revendedores de nafta y esa era una lección que íbamos a poner en práctica inmediatamente.
Así que les consultamos a dos o tres personas del poblado nos informaron donde podíamos comprar combustible. Así que fuimos a llenar nuestros tanques.
Ubicamos el lugar donde se encargaban de vender la nafta y ahí descubrimos por primera vez que el Honda Tornado funciona con Coca Cola. Jaja A las fotos me remito.
Aclaración: Si se fijan en las fotos le tape el rostro a la persona que nos vendió el combustible. Lo voy a hacer para el resto de revendedores de acá en más. Como en Bolivia no es del todo legal hacer esto prefiero que nadie sepa quién es esta persona para no comprometerla ya que se están ganado el mango diario. Las fotos de este tipo lo voy a dejar oculto y solo lo van a poder leer usuarios registrados.
El tema de fraccionar en botellas de Coca de 1.5 litros tiene dos puntos durante la venta: practicidad y confiabilidad. La practicidad es porque la mayoría de este combustible de reventa lo consumen las motos de 110 de las que hay cientos circulando por todos lados. Con 3 botellitas llenas un tanque completo en algunos casos si sobra medio litro el comprador se lo lleva en esta botellita y aparte como estos envases son descartables siempre hay mucha disponibilidad de ellos. La confiabilidad es porque en un recipiente de Coca Cola todo el mundo sabe que entra un 1.5 litros. Esto dicho por uno que me vendió nafta. Nada personal son solo negocios. jaja
Sigue...